
En la parte más elevada del Monte Ararat, en la zona este de
Turquía, existe una gran “anomalía”, que podría ser el Arca de Noé,
de acuerdo a las investigaciones que Porcher Taylor ha venido
realizando con imágenes satelitales desde hace 13 años.
Leonard David de la revista Space da cuenta de estos estudios. La
mencionada anomalía se encuentra a cuatro mil 663 metros de altura, está
en la zona noreste del Monte Ararat y está cubierta por hielo
glacial. El tamaño de la formación, de acuerdo a las imágenes del
satélite, 309 metros, equivaldría a los 300 por 50 cúbitos que
medía el Arca de Noé, como explica el libro del Génesis.
Taylor, profesor asociado de la Escuela de Estudios Continuos de la
Universidad de Richmond en Virginia, afirma tener “un nuevo optimismo...
que va hasta donde me permita la comunidad científica para descifrar
las imágenes cada vez más definitivas”, y señala “un nuevo y
significativo descubrimiento”, una imagen tomada por DigitalGlobe del
satélite QuickBird.
En esta investigación, también están incluidas imágenes tomadas
por la unidad aérea GeoEye's Ikonos del satélite QuickBird, el
Radarsat 1 de Canadá, y otras imágenes tomadas por varias agencias de
inteligencia de Estados Unidos. "No tenía ninguna idea preconcebida o
agenda cuando comencé esto en 1993 en cuanto a lo que estaba buscando”,
señaló Taylor.
"Considero que si los restos son algo náutico hecho por el hombre,
entonces potencialmente podría ser algo de proporciones bíblicas”,
remarcó. Además, “ya tenemos tres nuevas unidades aéreas que van a
tomar más imágenes. Estoy utilizando todo lo que tengo para, con suerte,
observar mejor la zona del Monte Ararat en cuestión”, informó.
Por su parte, el analista de imágenes satelitales, Rod Franz de
SunTek Media Group/RiteImage ha investigado la imagen obtenida en donde
ha podido determinar distintas distancias y escalas de la anomalía.
“También intenté determinar si se podía observar algo debajo del hielo y
la nieve”, comentó.
Franz pudo determinar que el frente de la anomalía mide 309 metros.
"Pude asimismo darle forma y me di cuenta de que encaja en un círculo.
No estoy seguro de lo que esto signifique, si significa algo, pero lo
encuentro muy curioso”. Dada la distancia, Taylor precisó que la
anomalía supera largamente al Titanic y al Bismarck en tamaño e iguala
el tamaño de los más grandes portaviones actuales.
Por ahora, estas “excavaciones” arqueológicas desde el espacio
reemplazarán a una expedición en el campo, como en el caso de las ruinas
Mayas descubiertas hace algunas semanas por la NASA utilizando la misma
técnica.
“Para los exploradores, las imágenes obtenidas por GeoEye junto con
la información que proporciona el sistema de Global Positioning System
(GPS) se ha convertido en el agua y la comida congelada de cualquier
expedición. Uno no quiere salir de casa sin ellas”, afirma Mark Brender,
Vicepresidente de comunicaciones y marketing de GeoEye.
Para los investigadores, las imágenes tomadas desde el espacio
proporcionadas por GeoEye permiten tener lo más avanzado, así
como una vista que no se podría obtener desde el suelo y ni siquiera
utilizando aviones para la observación. Para Brender, estas imágenes son
“el suero visual de la verdad".